5.400 muertos en Bogotá
46 años después de presentado el siguiente documento, Greenpeace le da la razón al autor de la ponencia:
En 2020 murieron 5.400 personas en Bogotá por efectos de la contaminación del aire
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DECLARACIÓN DE LOS PERIODISTAS SOBRE DEFENSA DEL MEDIO AMBIENTE
Ponencia presentada al Seminario Nacional de la Asociación Latinoamericana de Periodistas para el Desarrollo (ALACODE), por Germán Navarrete, de Bogotá, y aprobada por unanimidad por los 31 asistentes de Medellín, Cali, Barranquilla, Santa Marta, Pereira, Manizales, Cúcuta, Cartagena y Bogotá.
Los asistentes al Seminario Nacional de la Asociación Latinoamericana de Periodistas para el Desarrollo, realizado en Bogotá el 9 y 10 de mayo de 1975,
C O N S I D E R A N D O:
(Foto del Diario Concepción en Viajes BIDtravel blog – BIDtravel)
Que la flora y fauna marina han sido señaladas por los científicos de todo el mundo como uno de los recursos naturales que alimentarán a las generaciones del futuro;
Que del adecuado aprovechamiento de los recursos naturales depende el mejoramiento de la economía de los países en desarrollo, en especial de aquellos que por su riqueza en flora, fauna marina y explotación agropecuaria pueden convertirlos en las despensas adecuadas para surtir de alimentos a los países donde estos hacen falta;
Que América Latina ha sido considerada por biólogos marinos, químicos e ingenieros químicos como un “paraíso pesquero”;
Que naciones como el Japón y Chile han incluido ya las algas marinas en su alimentación diaria;
Que cada año mueren en Colombia 90.000 niños menores de 5 años, y el 5 por ciento de esas muertes están relacionadas directa e indirectamente con la desnutrición;
(Foto de polodemocrático.net – Información al desnudo –
Cada 33 horas muere un niño de hambre en Colombia).
Que la Universidad Nacional, después de 4 años de investigaciones en algas marinas del Océano Atlántico, prepara la elaboración de una proteína a base de algas verdes, que podría convertirse en un ”superalimento” para niños, por tener la propiedad de superar las proteínas de la leche y los huevos, mientras la Universidad de los Andes ha comprobado que en la Guajira algas marinas utilizadas como fertilizantes en las cosechas, aceleran y mejoran el rendimiento de los cultivos mediante el desarrollo de un procedimiento biológico natural que elimina la peligrosa contaminación causada por los fertilizantes químicos;
Que en Colombia hay más de 500 especies de algas marinas en los mares que bañan las costas Atlántica y Pacífica, entre las cuales figuran varias que no se han encontrado en ninguna parte del mundo, según el científico Reinhardt Schnetter, de la Universidad de Giessen, Alemania Federal;
(Foto de la Agencia de Noticias de la Universidad Nacional).
Mientras en el Caribe colombiano se registran más de 150 investigaciones publicadas sobre los compuestos químicos de organismos marinos (principalmente esponjas y octocorales), en el Pacífico colombiano tan solo existe un estudio sobre algas marinas en Buenaventura. Así lo demostró la investigación de Claudia Bautista Rodríguez, magíster en Ciencias – Químicas de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL).
Que el aumento en la producción de alimentos es uno de los aspectos primordiales del Plan Nacional de Nutrición que prepara el Gobierno para atender las necesidades de la creciente población colombiana;
Que la pesca es considerada por el Departamento Nacional de Planeación (DNP) como “vital” para el éxito del Plan Nacional de Nutrición;
Que el 70 por ciento de la población colombiana está incapacitada económicamente para alimentarse bien en el área urbana, mientras el 67 por ciento de la población rural se halla en similar condición, según el Departamento Nacional de Planeación (DNP);
Que especialistas del INDERENA han advertido la necesidad de diversificar la explotación de la pesca colombiana, lo cual indica que en el futuro el pueblo consumirá una mayor cantidad de pescado al abaratarse el costo de este producto;
Que los biólogos marinos e ingenieros químicos de las Universidades Nacional, Jorge Tadeo Lozano, Javeriana y Los Andes, entre otras, han comprobado la contaminación de la Bahía de Cartagena y advertido el grave peligro de envenenamiento en que se encuentran la flora y la fauna marina de esa zona, como también la creciente contaminación del mar en Santa Marta y Barranquilla;
(Foto de Jesús David Moreno)
En abril de 2020 la Teniente de Navío Natalia Burgos Uribe, Jefe del Área de Protección del Medio Marino del Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas del Caribe (CIOH), anunció que las aguas de la hermosa Bahía de Cartagena recuperaron su color azul turquesa por la suspensión de las actividades marítimas que produjo el confinamiento de la población debida al Covid 19. En épocas normales las embarcaciones aportan derrames oleosos y contaminantes.
Que el INDERENA advirtió al Departamento Nacional de Planeación el riesgo de que la Planta de Alquilatos de Barrancabermeja contaminará al Río Magdalena, con lo cual se pone en peligro la “subienda”, que al proveer de pescado a millares de familias le deja a Colombia ingresos por más de 160 millones de pesos al año, y a pesar de este concepto negativo la planta será puesta en funcionamiento;
Que los estudios realizados por ingenieros químicos de la Universidad Nacional, revelados en 1972 durante el X Congreso Nacional de Ingeniería, sobre la forma como aumenta la mortalidad por carcinoma gástrico en las zonas de mayor contaminación ambiental, se vieron confirmados por el Instituto Nacional del Cáncer, de los Estados Unidos, donde un grupo de científicos acaba de revelar un estudio para probar que “existen indicios que demuestran cómo la contaminación ambiental de las grandes ciudades puede tener incidencia directa en el aumento del cáncer en los pulmones, el hígado y la vesícula”;
Que el país tiene una clara demostración de cómo la contaminación extermina la flora y la fauna, pues el Río Bogotá, donde hasta hace pocos años los campesinos conseguían peces para alimentar a sus hijos, se ha convertido en una alcantarilla destapada donde la pestilencia y el hedor de las aguas originaron la desaparición de los peces;
Que los residuos de desechos industriales, algunos de ellos de reconocidas propiedades cancerígenas para el hombre, son absorbidos por los peces y ponen en peligro la salud de las poblaciones pesqueras al ser consumidos no solamente por los pescadores sino por las familias que lo utilizan en su dieta diaria;
Que en ciudades como Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla y Bucaramanga, el creciente número de vehículos automotores origina cada minuto escapes de monóxido de carbono y este agente contaminante, junto con otros elementos lanzados al aire por las grandes fábricas afectan cada día más la salud de las gentes, en especial la de los niños;
Esta era la contaminación que producían los buses de Transmilenio en 2018 en Bogotá. En 2021 fueron chatarrizados y cambiados por 1.400 buses “euro5”, que no contaminan. (Foto del Sistema Transmilenio).
Que cada vez que se talan los bosques del Pacífico, hay una pérdida neta del 50 por ciento de las especies existentes en el área afectada, según el propio Director del INDERENA, doctor Julio Carrizosa Umaña;
Que la Asociación Latinoamericana de Periodistas para el Desarrollo (ALACODE), capítulo de Colombia, es consciente de su responsabilidad social para contribuir a la divulgación de todo aquello que busque el bienestar y la protección de la salud del pueblo,
E X H O R T A N:
Al Gobierno Nacional, para que haga cumplir, efectivamente, todas las normas con que el país cuenta en materia de control a la contaminación ambiental y la polución, implementando aquellas sobre las cuales no se haya legislado para defender el medio ambiente, y que realice en este año el “Día Nacional para la Defensa del Medio Ambiente”, a fin de llamar la atención de todos los colombianos hacia la urgente necesidad de frenar la polución de los ríos, los mares y el aire;
(Foto de Fernando Calzada)
Los ríos de varios países del mundo son convertidos en depósitos de chatarra adonde llegan personas a buscar elementos para reciclar. Debido a que esta actividad incluye niños, UNICEF y “Pure Earth”, en el informe “La Verdad tóxica” advirtieron en marzo de 2021 que 800 millones de niños están contaminados con plomo en la sangre. Las principales fuentes son la minería, tanto primaria como secundaria; la chatarrería, su fundición; el reciclado o la quema de residuos a cielo abierto; las baterías; la soldadura, las pinturas industriales y los colorantes; los vidrios, cristales, etc.; los plásticos, las tuberías.
También hay usos como el del plomo de las naftas y los funguicidas, o muchos otros que ya están descontinuados, como los recipientes metálicos de o con plomo, la cerámica vidriada, los vidrios de colores, las pinturas decorativas, los lápices de colores, las cañerías de agua, los juguetes (en plásticos, pinturas y otros), la contaminación de alimentos y agua, entre otros. (Fuente: Infobae).
A los medios de comunicación colectiva para que investiguen cuál es actualmente la situación, no solo de los ríos y los mares, sino de la salud de los habitantes de las grandes ciudades, para precisar a qué grado ha llegado la contaminación ambiental en el país y poder ilustrar más al Gobierno Nacional, a fin de que éste adopte las medidas necesarias para solucionar un problema que afecta la salud de todos los colombianos;
Cuarenta y seis años después de haber sido aprobada por unanimidad la ponencia de Germán Navarrete por los periodistas asistentes al Seminario Nacional de la Asociación Latinoamericana de Periodistas para el Desarrollo (ALACODE), la situación ambiental descrita en el documento había adquirido características de desastre en la capital colombiana.
En un informe entregado en febrero de 2021, Greenpeace reveló que por lo menos 5.400 personas murieron en Bogotá en 2020 por enfermedades respiratorias debido a la mala calidad del aire de la ciudad, generada especialmente por combustibles fósiles. La principal fuente de emisiones contaminantes proviene de automóviles, camiones y fábricas. Las partículas PM 2.5, emitidas por los automotores, son altamente cancerígenas y esto incide en el aumento de casos de cáncer en los pulmones, según Tatiana Céspedes, directora de las campañas de la ONG. Greenpeace, además, estimó en mil trescientos millones de dólares, equivalente a más de 4 billones de pesos colombianos, los costos de los efectos de la contaminación atmosférica de Bogotá en 2020.
A todos los periodistas colombianos para que comprendan la urgente necesidad de aportar su decisiva colaboración en la lucha contra la contaminación ambiental, en la seguridad de que al hacerlo estarán contribuyendo a asegurar una mejor salud no solo para sus propios hijos, sino también para las generaciones del futuro, a la vez que aportarán una valiosa ayuda para defender los recursos naturales renovables que son la base de la prosperidad económica de la Nación;
A los gremios latinoamericanos de periodistas, para que en sus respectivos países adopten igual actitud, con el ánimo de iniciar la defensa colectiva de los recursos naturales renovables del Continente;
A la Organización de Naciones Unidas (ONU), para que realice el “Día Mundial para la Defensa del Medio Ambiente”, evento que permitirá conocer cuál es el estado actual del planeta y cómo el arrojar a los ríos y mares toda clase de desechos y residuos industriales, además de gases contaminantes a la atmósfera, alteran el equilibrio ecológico del mundo y ponen en peligro la vida de los seres humanos si no se adoptan drásticas medidas para controlar y frenar el avance de la polución;
(Foto: Medio Ambiente Web – Pinterest.es.)
La polución del aire es un problema que afecta especialmente a las grandes ciudades del mundo. A mediados de 2018 un total de 50 ciudades de China estaban en “alerta roja por contaminación” y las autoridades recomendaban a más de 100 millones de personas que no salieran a las calles. Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima en 7 millones las muertes anuales por causa de la contaminación, pero también se producen efectos adversos a nivel mental, como se desprende de un estudio realizado en China que relaciona la polución con la pérdida de capacidad intelectual. (Fuente: Blog de la Fundación Mapfré).
Al mismo tiempo, los periodistas reunidos en el Seminario Nacional de ALACODE expresan su solidaridad con los países que defienden las 200 millas de mar territorial, como paso ineludible para proteger sus recursos marinos. Por último, plantean la necesidad de que nuestra Patria reclame también soberanía sobre su mar territorial.
Bogotá, Mayo 10 de 1975